ARLA/CLUSTER: WiFiber a tecnologia que vem revulocionar as ligações sem fios.

[João Gonçalves Costa]

WiFiber: Tan rápido como la fibra óptica

Una nueva tecnología inalámbrica que alcanza una velocidad de 2.7 Gbps promete revolucionar el mercado de conectividad actual.

Hasta hoy, la fascinación por las conexiones inalámbricas tenía un pero. La velocidad. Repito, hasta hoy, porque ya se encuentra en el mercado estadounidense un nuevo tipo de dispositivos sin cables, que permite transmitir y recibir datos hasta 2.7 Gbps. Para que se haga una idea, si usted cuenta con WiFiber, podrá bajar un video de noventa minutos, en sólo 6 segundos, algo que tardaría más de noventa minutos con una conexión ADSL.

Aunque muchos intentaron alcanzar estos niveles de velocidad a través del aire, nadie antes lo había logrado.

Y es que no contaban con la astucia de GigaBeam, una compañía de telecomunicaciones americana, que decidió explotar una parte totalmente diferente del espectro. Los sistemas que antes habían tratado de aumentar la velocidad, utilizaban frecuencias terahertz, un área muy cercana a la luz visible. El problema acá es que las condiciones ambientales, como la lluvia o la niebla, pueden alterar la transmisión de información. Esto no ocurre en las frecuencias gigahertz de 71 y 95. ¿Adivinó? Esta es justamente la parte del espectro electromagnético que utiliza WiFiber.

El otro chiste es que todos los sistemas inalámbricos tradicionales usan las frecuencias entre 2.4 y 5 gigahertz, lo que produce una suerte de "congestión" espacial, que obviamente complica la transmisión de datos, haciendo todo el proceso más lento. Con el nuevo WiFiber, adiós a las interferencias.
Claro que no es cosa de llegar y construir este tipo de aparatos y transmitir en estas altas frecuencias. La chispa de los desarrolladores de GigaBeam estuvo en construir dispositivos a partir de arseniuro de galio, y no de silicona como los que hoy dominan el mercado.
Si bien la velocidad alcanzada por la nueva tecnología es similar a la que provee la fibra óptica, WiFiber presenta varias ventajas que la hacen más atractiva que su rival.


Por ejemplo, para navegar a altas velocidades ya no es necesario contar con cableado estructural, lo que le da conectividad a las zonas más aisladas del planeta. Además, en zonas urbanas su instalación es mucho más fácil y rápida.

Pero, siempre hay un pero. La cobertura aún es limitada. En condiciones áridas alcanza hasta 9 kilómetros, y con lluvia sólo se despliega un kilómetro. Y aunque su costo todavía es alto (la compañía espera vender cada receptor en 45 mil dólares), los avances científicos harán que esta tecnología sea cada día menos prohibitiva.

Y ya hay bastantes entusiasmados con la nueva revolución inalámbrica. Uno de ellos es el magnate norteamericano Donald Trump, quien brindó conectividad inalámbrica a partir de dos radios situadas en las torres de sus dos joyitas: El Trump International & Tower y su edificio residencial.
Esta es la primera de las 20 instalaciones de WiFiber que están planeadas para este año en Nueva York.
Otros interesados menos glamorosos que Donald, son los universitarios. Los estudiantes de la Boston University, Oklahoma State University, Darmouth College y la Universidad de Maryland, ya pueden descargar video y música más rápido que inmediatamente.

"Estas implementaciones validan la educación como un mercado muy importante para WiFiber, donde el acceso a grandes volúmenes de información rápidamente es fundamental", dijo Louis Slaughter, CEO de la compañía en un comunicado de prensa.

Los irlandeses también se encuentran ávidos por contar con la nueva tecnología. ComReg, el ente regulador de telecomunicaciones de Irlanda, ya emitió una licencia de prueba para implementar WiFiber, la primera en toda Europa.